165 Euros

viernes 8 de enero de 2010

Han pasado unos meses y sigo tomando el café en el mismo bar, no tengo intención de cambiar, ¿para qué?. A mi camarera favorita le han cambiado de horario y ahora la veré menos a menudo, aún así busco un hueco para saludarla casi todos los días. Cuando no la visito, me pone falta y me lo recrimina desde su pícara sonrisa.
Tras semanas de incertidumbre, su pareja, que vino a España al poco de recibir mi microcrédito, por fin ha encontrado trabajo. Han sido semanas terribles para ellos, él ha deambulado de casa en casa de conocidos mantenido a duras penas por ella. Estaban juntos pero separados y casi no les llegaba para comer. Yo he estado a la expectativa dudando que hubiera colaborado en algo positivo, flaqueándome la fe, pero sin decir nada salvo ánimos a mi amiga, todo pasa, aguanta un poco más.
Por fin poco antes de Navidad encontró un trabajo bien remunerado, parece ser que las cosas empiezan a salir por fin, sólo había que esperar y yo, esperé con ella.
Y colorín...

Comentarios

  1. Éste era el último relato de los anterioresque me quedaba por publicar en este blog. Ni es el mejor, ni aporta nada nuevo para muchos de vosotros, pero me apetecía verlo aquí con los demás. Muchas gracias.

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