Ahora nos conocemos


Desde la ventana, cruzando los visillos una luz sin brillo iluminaba su cara blanquecina. Una ventana con vistas a una pared de ladrillo blanco y a un jardín de piedras blancas, que en otros tiempos había servido para criar pollos y cerdos.
Los ojos cerrados y la boca abierta, unos pulmones encharcados intentando recoger aire. 
El ruido de una respiración lenta y abrupta cesa sin más.
Una luz sin brillo ilumina su cara amarillenta. El silencio.


Comentarios

  1. Dos silencios que se encuentran, la ayuda de un boca a boca cuando todo está a punto de terminar?,

    difícil interpretación para mi mente cuadriculada.
    Lo que seguramente desconoces es la nueva dirección del mismo blog en el que estaba: http://angeles-piensoluegoescribo.blogspot.com/
    Pero sí conoces mi sino.

    Te espero, un abrazo ahora que hace un año que estuve por esos lares Á.

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  2. Probablemente tampoco reciba visitas. Así jamás cambiará el tono de su rostro, ni el gesto.
    uff...

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  3. Me gusta !!! He lelgado aquí a través del blog....te seguiré. Por cierto, e´res bienvenida en el mío !!!

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  4. Ahora nos conocemos...

    El silencio cuando alguien deja de respirar y conoce a la muerte. Triste forma de morir, agonizando de esa manera.

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  5. La Muerte no sería tan Trite ni Dlorosa si no fuese siempre precedida por la Agonía.

    Un Beso con Brillo, Nines.

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  6. La verdad es que soy una privilegiada, que a los 40 acabe de ver a la muerte cara a cara no significa otra cosa que mi vida ha sido dulce.

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